jueves, 31 de diciembre de 2009

Para recordar. parte 1

Esta es una pequeña recopilación de imágenes de los años sesenta y setenta.
Los que tenemos cerca de 50 años pasamos buenos ratos de esparcimiento con algunas de las series de tv que les mostramos.
Espero que les traiga buenos recuerdos de su infancia. Aprovechen de mostrárselos a sus hijos y a los de menos edad y así vean el tipo de televisión que veíamos y les mencionan que no había control remoto ni pantallas lcd ni plasma con HD.












sábado, 26 de diciembre de 2009

EL EFECTO MARIPOSA



"Un día, en una pequeña abertura apareció una oruga; un hombre se sentó a observar a la mariposa durante varias horas, viendo cómo se esforzaba para hacer que su cuerpo saliera a través de aquel pequeño agujero.
Llegó un momento en que pareció que la oruga, a pesar de su esfuerzo, no avanzaba nada.
Parecía que había llegado a un punto en que ya no podía avanzar más...
Entonces el hombre decidió ayudar a la oruga y agrandó el agujero. La mariposa salió sin dificultad.
Pero su cuerpo estaba débil, las alas no estaban desarrolladas y las patitas no la sostenían.
El hombre continuó observándola esperando que en cualquier momento se lanzara a caminar y emprendería el vuelo a través de las flores.
Pero nada sucedió. La verdad es que la mariposa pasó toda la vida arrastrándose por el suelo. Fue incapaz de elevar el vuelo.
Lo que el hombre que con toda su buena voluntad quiso ayudar a la mariposa, no entendía es que, al hacer un gran esfuerzo para atravesar el pequeño agujero, los jugos vitales se iban distribuyendo y extendiendo por las partes del cuerpo que requerían fortaleza para volar.
Al pasar el agujero sin ese esfuerzo, las alas no recibieron la sustancia necesaria para desarrollarse y poder cumplir su propósito que es permitir volar a la mariposa.
Algunas veces necesitamos el esfuerzo y la dificultad en nuestra vida.
Si Dios nos permitiera pasar por nuestras vidas sin obstáculos, quedaríamos débiles. No llegaríamos a ser tan fuertes como deberíamos. Nunca podríamos llegar a volar.
Yo pedí fuerza, y Jehová permitió que sufriera para hacerme fuerte.
Yo pedí sabiduría, y Jehová permitió que enfrentara problemas por resolver.
Yo pedí prosperidad, y Jehová me dió inteligencia para subsistir.
Yo pedí coraje, y Jehová me permitió obstáculos para superar.
Yo pedí amor, y Jehová me permitió conocer personas con problemas a quienes ayudar.
Yo pedí favores, y Jehová me dio oportunidades
Yo no recibí algunas cosas que pedí, pero he recibido todo lo que necesitaba.

Vivamos nuestra vida sin miedo, enfrentemos todos los obstáculos y demostremos que podemos superarlos.

“No nos apoyemos en nuestro propio entendimiento
y siempre tomemos en cuenta a Jehová”. Pro 3:1-5

miércoles, 23 de diciembre de 2009

¿Amigos virtuales?



En cierta ocasión leí que recibir mensajes vía e-mail era bueno para mejorar nuestro estado de ánimo.
No sé sí esto tiene algún fundamento científico. Sé interpretar mis sentimientos y no tengo ninguna duda que esto es una realidad.
En los últimos años he tenido el privilegio de conocer personas fantásticas que entran en mi vida en los momentos más inesperados, trayendo mensajes de optimismo, de calidad, de vida, de humor, de reflexión.
Casi todos los días recibo e-mail de personas de buena voluntad, personas que se han tornado importantes en mi vida, a veces estas personas están a miles de kilómetros.
Estoy impresionado de conocer personas con disposición y disponibilidad para ser generosas, afectivas, enviándome mensajes que me reconfortan, ayudan e incentivan.
A los que no les gusta la computadora, es porque no descubrieron las posibilidades que les puede proporcionar.
Seguramente me dirán que no se puede sustituir por un abrazo.
Es cierto.
Pero les puedo decir que en los últimos años yo me he sentido abrazado constantemente.
A las personas que me envían poemas, música, humor, fotos...
los llaman ¿amigos virtuales?
Entonces tengo que decirles que estas personas de virtuales no tienen nada.
Pues ponen en forma de mensaje y de manera palpable su afecto.
¿Dónde podrías imaginar una cosa así?
En todo este tiempo, algunas personas sólo me han enviado algún mensaje ocasionalmente.
Otras, se mantienen constantes y no sólo forman parte de mi agenda de direcciones de mi correo electrónico. Confieso que ocupan también un lugar preferente en mi corazón.
Estoy pendiente de los mensajes como un adolescente esperando a mis amigos, y para algunas cosas, no deberíamos crecer nunca.
Lógicamente, como todo en la vida, hay que saber hacer uso de esta otra forma de relacionarnos. No debemos renunciar al contacto físico, pero a veces la falta de tiempo y la distancia hacen de este medio, una forma eficaz de mantener el contacto con la gente que verdaderamente nos importa.
Lo inesperado de ser sorprendidos con un mensaje cariñoso que viene cargado de afecto, causa una verdadera corriente positiva, la cual puede, en muchos momentos, ser terapéutica.
En un momento determinado, el mensaje parece estar hecho a propósito para un mal momento por el que estemos pasando.
Pero, puedes tener la certeza, que cuando menos lo esperes te llegará esa imagen, esa música o esas palabras que te harán sentir mejor.
Muchas veces uno espera recibir algún mensaje amigo y de repente, está el mensaje que tanto esperaba.
También podrás decir que recibimos mucha basura.
Pero, ¿esto también acaso no pasa en la vida real?
El truco está en filtrar y quedarse sólo con lo positivo.
Nuestra tarea es hacer una selección de lo que es bueno. De lo que nos puede hacer crecer como personas, de lo que nos puede hacer pensar, reflexionar, sentir, estar vivos, amar, saber que no estamos de paso, que no cuesta nada hacer feliz al prójimo y a nosotros mismos.
Estas personas pasarán a tener un espacio garantizado en mi vida. Algunas veces resultará difícil responder a todos en el tiempo que uno quiere. Pero, estoy convencido que merece la pena dedicar parte de nuestro tiempo para repartir cariño, sólo con los simples comandos de “Enviar” o “Reenviar”.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Amistad



Para mis amigos;
Hace muchísimos años, un joven recién casado estaba sentado en un sofá en un día caluroso y húmedo, bebiendo jugo helado durante una visita a su padre. Mientras conversaba sobre la vida, el matrimonio, las responsabilidades y las obligaciones de las personas adultas; el padre revolvía pensativamente los cubos de hielo de su vaso y lanzó una mirada clara y sobria hacia su hijo.
- "Nunca olvides a tus amigos", ¡aconsejó!, "Serán más importantes en la medida en que envejezcas".
"Independientemente de cuanto ames a tu familia y los hijos que por ventura vayas a tener, tu siempre necesitarás de amigos. Recuerda ocasionalmente salir con ellos, realiza actividades con ellos, telefonéalos..."
"¡Que extraño consejo!" pensó el joven. "Acabo de ingresar al mundo de los casados, soy adulto y con seguridad mi esposa y la familia que iniciaremos ¡serán todo lo que necesito para dar sentido a mi vida!"
Con todo, él obedeció a su papá; mantuvo contacto con sus amigos y anualmente aumentaba el número de ellos. Con el pasar de los años, él fue comprendiendo que su padre sabía de lo que hablaba.
En la medida en que el tiempo y la naturaleza realizan sus designios y misterios en un hombre, los amigos resultaron baluartes de su vida.
Pasados los 50 años de vida, he aquí lo que aprendió:
El tiempo pasa.
La vida continúa.
La distancia separa.
Los niños crecen.
Los empleos van y vienen.
El amor se debilita.
Las personas no hacen lo que deberían hacer.
El corazón se rompe.
Los padres mueren.
Los colegas olvidan los favores.
Las carreras terminan.
Mas, los verdaderos amigos siempre están ahí, no importa a cuánto tiempo o a cuantos kilómetros se encuentren.
Un amigo nunca está más distante que el alcance de una necesidad, haciendo barra por ti, interviniendo a tu favor, esperándote de brazos abiertos o bendiciendo tu vida.
Cuando iniciamos esta aventura llamada VIDA, no sabíamos de las increíbles alegrías o tristezas que estaban delante. No sabíamos de cuanto necesitaríamos unos de otros.

Pro 17:17

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Cong. San Miguel







Esta es una Congregación pequeña, 28 publicadores y 7 son precursores regulares.
Reciben ayuda de algunas Congregaciones de Caracas para abarcar el territorio que tienen asignado.
Su territorio esta compuesto por un pequeño pueblo y muchos caseríos en sus alrededores, viven de la ganadería y de la agricultura.
Con la bendición de Jehová los hermanos estan haciendo una excelente labor.
Cuando nuestras responsabilidades y las circunstancias nos lo permiten también los apoyamos.

martes, 15 de diciembre de 2009

saludos

Este es nuestra primera entrada, somos seguidores de varios blog teocráticos y de manera progresiva iremos publicando nuevas entradas.

saludos de Nelson y Alcida.